Estuvimos visitando a la Tía Vicky con la buena fortuna de encontrar a Ricardo y coincidir con la llegada de la Tía Ana.
Muy agradable el encuentro y un rato de compañía para quién dió mucho a hermanos y sobrinos.
Se ríe la tía y parece que entendiera que todos la rodean en estos momentos de como dice cuando se le pregunta: "aquí estoy, amansando soledad".
Unas fotos para el recuerdo futuro.