Para nuestra familia, existen personas especiales que han dejado huella en nuestra existencia.
Siendo niños tuvimos la suerte que la familia se mudara a un vecindario que nos permitió conocer personas que hoy recordamos con cariño.
Nuestros vecinos de siempre, " LOS MORA"son de esas personas que siempre recordaremos y que aún hoy que han pasado muchos años son de vez en cuando tema de nuestras conversaciones por la cantidad de recuerdos agradables que tenemos con ellos.
Dentro de esos vecinos había una persona muy especial que siempre estuvo presta en nuestra infancia y juventud a servirnos de apoyo en cuanta circunstancia adversa se nos presentara.
Al rompe, recuerdo de pronto, la cantidad de "masajes con pomada de vaca"que nos dío Lola después de una tarde de fútbol.
Pués Lola está de nuevo con nosotros, y con Ricardo en nuestras visitas dominicales, era parada obligada.
La encontramos casi que exacta como se fué y quedamos en visitarla a menudo y sacarla para visitas a nuestra familia por la que preguntó como si no hubiera estado tantos años ausente de estas tierras.
Al final llegó Mauricio quién se sumó con Ximena a la visita.
Ya tendremos oprtunidad de ir nuevamente, pero por lo pronto unas fotos serán parte de los recuerdos futuros.
Alguna vez le contaremos a nuestros nietos de los maravillosos vecinos que tuvimos en nuestra infancia.
Parte de los recuerdos es el " acuario "que tanto nos distraía cuando jóvenes y que estuvo siempre en la sala de "LOS MORA".
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