domingo, febrero 11, 2007

REMEMBRANZAS













Día fructífero espiritualmente y de agradecimientos inmensos a nuestros padres.
La casualidad o quizás algo mejor, "nuestro pasado", hizo que nuestra visita de hoy llegara al sitio justo donde los recuerdos de la infancia y juventud, se confunden en nuestra mente en un ir y venir de imágenes, que en mi caso particular quisiera, si nos fuera dado el don de la regresión volver a repetir.
Con Ricardo y por coincidencia como dije anteriormente, llegamos a la puerta de la que fue nuestra casa en la infancia.
Recordamos muchos eventos ante el frente de ella, hoy por los cambios de rumbo que toman las cosas convertida en recinto religioso y caminamos durante un rato por la acera que fue testigo mudo de nuestros juegos de infancia.
Ricardo se acordó de muchos pasajes y recuerdos de cada uno de nosotros y a medida que caminabamos nos preguntabamos por el estado y situación de los que fueron nuestros vecinos en esa época.
Al encontrarnos con el hijo de uno de nuestros vecinos, preguntamos por el estado de salud de una señora que sabíamos vivía todavía en la misma casa.
La Señora Tomasita, que recordábamos por ser las esposa del compañero de juego de ajedrez de Ricardo en sus primeros intentos por incursionar en el juego ciencia,y también por ser muy allegada a la familia Mora que fueron nuestros vecinos de toda la vida.

El comienzo de la conversación y con la natural sorpresa por nuestra inesperada llegada, nos llevó a indagar por cada uno de nuestros vecinos.
Así nos enteramos de las andanzas de la mayoría de quienes fueron nuestros compañeros de juegos y travesuras juveniles.
Al pasar el tiempo siempre habíamos guardado un especial agradecimiento a nuestros padres por la forma en que fuímos criados pero hoy al salir de esta visita hemos comprendido aún más cuanto le debemos en agradecimiento a "Miguel y Merce".

La señora Tomasita, quizás con un poco de amargura en sus palabras, expresó cuanto daño hicieron los vicios en la juventud de esa "cuadra" y como la "famosa disciplina" de Miguel y Merce lograron hacer de nosotros lo que somos hoy día.
Gran cantidad de nuestros amigos por no decir todos, cayeron en las garras del vicio y las historias que escuchamos, hicieron que al salir Ricardo y y Yo, comentáramos lo especial que habían sido nuestros padres para encarrilar nuestras vidas.
Sirva este pequeño rincón, para volver a agradecer a los dos y mirando sentado en su silla a nuestro padre, quizás pasando por trances que no merece y a los nunca encontraremos explicación, encontremos por fín las causas y razones de lo que en un principio y por causas lógicas de la edad no alcanzábamos a entender: "EL INMENSO CARIÑO Y AMOR QUE NOS DIERON".-

Tarde no esperada , pero llegada y recibida con alegría por nosotros ya que nos llenó de nuevas energías y nos confirmó que los propósitos hechos con Ricardo en este año, han causado el efecto esperado por nosotros.

Esperaremos la próxima visita y de seguro, quedará plasmada en nuestro sitio.
Unas fotos sirven como colofón a todo lo anterior.












1 comentario:

nelson dijo...

Como es de satisfactorio sentirse apoyado en proyectos que de pronto sòlos, no hacemos por cualquier circunstancia.
Nunca esperè que se convirtiera en rutina unas visitas que salieron de conversaciones normales y rutinarias
Como dice Ricardo "que crezca el nùmero de invitados, pues la mesa està servida".